Cuando afuera se hace de noche y los ojitos se van cerrando, nuestro Zorro Dormilón está ahí. La luz nocturna con forma de zorro no solo es tiernísima, sino que además aporta una luz suave y tranquilizadora al dormitorio infantil, justo lo necesario para dormirse en paz (o para leer a escondidas un ratito más bajo la manta).

Con su forma redondeada, agradable al tacto, y su brillo sereno, parece un pequeño guardián nocturno que vela los sueños y ahuyenta las pesadillas. Perfecta para niños que prefieren un poco de luz para conciliar el sueño, o para adultos que quieren añadir un toque de calidez junto a la cama.