
¡Qué difícil es decirle a las buenas personas que nos encontramos por el camino, lo especiales que son! Sin embargo, ya va siendo hora de recordar que queremos tener cerquita siempre a los buenos. Los seres que saben consolarnos, escucharnos o simplemente levantarnos el ánimo. Encuentras, seguro, al menos 101 razones por las que es persona es imprescindible. (Si no es ahora mismo, puedes empezar a pensar en ello). Pero si sientes la inspiración te lo ponemos fácil: escribe las 101 razones en nuestro práctico pergamino giratorio. Un encantador regalo de manualidades porque 1) es muy entretenido y 2) tiene ese toque personal que hace que los regalos merezcan mucho más la pena.
Para ser exactos: 101 veces más.

Es bien conocido el efecto saludable de las pelotas antiestrés u otras piezas de goma que se pueden apretar, estrujar, tirar, lanzar o maltratar de una u otra forma hasta la saciedad. A veces, tenemos que dejar fluir la presión reprimida, pero eso no siempre sirve. Para esos casos, tenemos nuestro pollo antiestrés. En primer lugar, puedes amasar esta robusta ave de goma según todas las reglas del noble arte antiestrés (eso ya está muy bien) y, en segundo lugar, el pollo chilla a la vez (aún mejor; así no tienes que gritar tú, aunque te apetezca).
Efectos secundarios: aunque reduce tu estrés, podría estresar a otros debido a su fuerte sonido. No es precisamente un modo elegante de hacerlo, pero puede resultar útil, siempre y cuando no te excedas y luego tengas que contar con las desagradables consecuencias. En cualquier caso, esto hace que este pollo graznador sea un regalo antiestrés y temido a partes iguales para los amigos, los colegas y cualquier otra persona para la que una bola antiestrés ordinaria ya no sea suficiente. Lo único que ayuda es el pollo. Por razones de higiene mental.

¿Te gustan los enigmas? ¿Buscas un regalo único, divertido e interesante? ¿Quieres poner a prueba las capacidades deductivas de un amigo o familiar? Este es tu aliado perfecto
Un bote basado en los cryptex mencionados en "El código Da Vinci" para hacer de tu regalo una auténtica caza del tesoro, o proteger tus pertenencias más preciadas.
Un cryptex es un cilindro protegido por una combinación. Antiguamente, se utilizaba para enviar mensajes secretos. Se escribía el texto sobre un delicado pergamino con el que se envolvía una probeta de cristal llena de vinagre. Gracias a un mecanismo, la probeta se rompía en caso de contraseña incorrecta o golpe fuerte. De este modo, si alguien intentaba abrirlo sin tener la contraseña, el mensaje era autodestruido.
Afortunadamente, vivimos en tiempos menos oscuros que Leonardo Da Vinci y por eso nuestro Cryptex carece de mecanismo de autodestrucción.
Deberás pensar una contraseña de 5 letras fácil de recordar pero difícil de adivinar. Te recomendamos no escribirla debajo del bote ni utilizar "abcde".
Puede ser el final perfecto para una gincana de cumpleaños, una divertida inocentada, una bonita manera de decir Te quiero y una perfecta idea para proteger tus caramelos de los golosos que te rodean.
Para los amantes del buen vino encontraréis "le Vino Vault Cryptex" que siguiendo la misma línea de secretismo, os ofrece un verdadero reto para poder degustar este zumo de uvas que tanto nos gusta.
¿Cuál será la clave elegida?
